Te damos la bienvenida a un espacio cálido y cuidado, donde puedes llegar con calma y aterrizar en ti. En un entorno tranquilo y silencioso, puedes soltar la tensión que vienes cargando. En el ritmo acelerado del día a día, es fácil desconectarse de uno mismo, del entorno y del momento presente. Durante la fase inicial del viaje sonoro, nos enfocamos en bajar el ritmo y encontrar quietud. Al tomarte un momento consciente para hacer pausa, desconectas del ruido externo y te abres a una sensación profunda de calma interior.

La práctica ancestral del sahumado con salvia ha sido valorada por muchas culturas por su capacidad de limpiar tanto el espacio físico como el energético. Al elevarse el humo aromático, se libera simbólicamente lo que ya no sirve y se invita a una energía más fresca y ligera. Una vez completado este pequeño ritual de limpieza, entrarás al espacio en silencio y elegirás tu lugar para comenzar el viaje.

Con una breve meditación, acompañada de movimientos suaves e intuitivos, reconectas con el cuerpo y dejas atrás lo que distrae. Este momento te invita a soltar tensiones —física y mentalmente— y a llegar al presente con más presencia. Juntos estableceremos una intención que tenga sentido para ti en este momento: ya sea soltar algo, abrirte a lo nuevo o dar espacio a un deseo del corazón. Esa intención será tu guía durante todo el viaje.

Cierra los ojos y déjate llevar por las vibraciones envolventes del sonido. Desde tu esterilla, te sumergirás en los tonos ricos y resonantes de cuencos tibetanos, gongs, shruti, monolina, didgeridoos, tambores y otros instrumentos de percusión. Estas frecuencias armoniosas crean un espacio seguro y profundamente meditativo, que acompaña la liberación de bloqueos y la suavización de tensiones.

El viaje sonoro es una experiencia transformadora, donde el sonido se convierte en guía. Un espacio libre de expectativas o exigencias, donde puedes conectar, sentir y explorar. Tal vez entres en un estado de meditación profunda, surjan emociones intensas o imágenes muy vívidas. Todo lo que aparezca es bienvenido. Todo es válido. Todo se abraza.

Durante toda la sesión, los facilitadores estarán presentes para sostener el espacio de forma cálida, respetuosa y contenida.

Cerramos el viaje con un círculo de palabra, ofreciendo un espacio seguro para compartir e integrar la experiencia. Después, disfrutaremos juntos de una cena vegetariana ligera, acompañada de infusiones y bebidas naturales.

Un Antara Sound Journey ocupa toda una tarde y parte de la noche. Dedicamos tiempo suficiente a explorar las distintas dimensiones del sonido, así como los silencios entre ellas. Esto permite que las vibraciones actúen en niveles más profundos. Tráete a ti, una esterilla cómoda, una manta cálida y un cojín. La experiencia se desarrolla en formato concierto tumbado, para que puedas relajarte por completo.